En partidos como el de hoy, es difícil sacar de la cabeza líneas para rellenar una columna. De todas formas, algo saldrá. Me viene a la memoria, cuando durante el partido de ayer entre el Real Madrid y el Olimpique de Lyon, se me ocurrió decir que en los últimos años el Lyon era la bestia negra del Madrid. A los resultados me remito, cuatro partidos jugados en dos años en la primera ronda de la Copa de Europa, 2 victorias y 2 empates a favor de los franceses. Ocho goles a favor y sólo tres en contra. El Madrid no puede o no sabe ganarle a ese equipo.
Nos trasladamos ahora a nuestro mundo. Pasamos de Europa a la Categoría de bronce del fútbol español y de la Champions a la Copa de la Real Federación Española de fútbol. La UDP se ha enfrentado en cuatro ocasiones en las dos ultimas temporadas al equipo cordobés. Las cuatro en primera ronda de Copa Federación. Las cuatro con victoria para los jugadores azules que dirige Sánchez de la Nieta. El balance goleador, 12 goles a favor y sólo uno en contra (como el famoso España-Malta). Mejora con creces los números del Lyon ante el Madrid, por lo tanto seguro que nuestros vecinos cordobeses hablan de nosotros como “su” bestia negra particular.
Es la única conclusión que se puede sacar de un partido, que no había despertado el más mínimo interés entre la afición. Sólo 700 espectadores (los buenos, he oído comentar a alguien en la grada) han acudido a la cita. La verdad es que los muchos que han faltado, no se han perdido gran cosa. Si acaso ver de nuevo al “Chispas” Alberto Olmo marcar otra vez con la elástica azul, al resolver perfectamente un mano a mano con el portero visitante. A los delanteros, eso de marcar goles es como lo de montar en bici, que una vez que se aprende no se olvida nunca. Y también ver jugar unos minutos a Manolo Serrano y al portero José Luís con el primer equipo. Nada más.
Se pasa la eliminatoria y a esperar el próximo rival, para seguir haciendo historia en esta competición.
El Domingo será totalmente distinto, cambiaremos la noche por el día, las gradas pasarán de estar semivacías a estar a reventar (por algo viene el líder), los jugadores estarán más motivados que hoy con total seguridad. Sólo hay una cosa que no debe cambiar……el resultado. Hay que empezar a ser la bestia negra del Universidad Las Palmas.
